Regresando

Ya estoy aquí, en el último minuto, antes de que COV me riña por no actualizar. Dejadme que comience felicitandoos el año nuevo al que se lo merezca. La mayoría ya tendréis vuestra lista de irrealizables intenciones lista para ignorar en un par de semanas, así que no os pese en la conciencia. Yo para evitarlo, hace años que no hago lista. Al menos no la hago el 31 de Diciembre, porque cosas e intenciones las tengo a lo largo de todo el año, otra cosa es que se sigan repitiendo infinitamente, año tras año. Las mismas intenciones y yo, tanto tiempo juntos que ya somos buenos amigos. :)

Vuelvo, decía, con las pilas recargadas en el descanso vacacional, cosa que necesitaba porque estaba agotado física y mentalmente, así que espero que estas duren al menos hasta las próximas vacaciones, que espero que no tarden en venir. Jajaja!

Sean ustedes bienvenidos al reencuentro, nos queda un tiempecitos más juntos. Las intenciones blogeras de este años (contradiciendo todo lo dicho en el primer párrafo, si tengo intenciones blogeras. Manías. Que le vamos a hacer) vienen por ir cerrando las partes abiertas del blog, que no son pocas. Creo que tengo algo de sangre de William Wallace reseca esperando, un viaje al lejano oriente abierto desde hace más de un año, un duelo a pixel o chocolate aún por resolver y supongo que muchas otras cosas. A este ritmo este blog se va a ir pareciendo a las mil y una noches, salvando el erotismo que yo mismo destilo, que es mucho más que el de la propia Scheherezada. Por si había alguna duda.

Que me lío. Resumiendo, que ya estoy aquí. A ver que nos depara el 2008. Disfrútenlo, que he oido por ahí que dura menos de lo que dicen y que se pasa en un suspiro.

A ver si van a tener razón.