viernes, diciembre 22, 2006

Algunas estampas navideñas

No me he podido resistir. Me despido de vosotros como más me gusta, con una buena ristra de fotos. Imagenes. Instantaneas de Londres en estos días. Las calles engalanadas con luces, algún armadillo navideño y algún que otro personaje.

Aún a sabiendas de que la niebla está haciendo estragos en los aeropuertos, me encomendo a la suerte y espero pasar unos cuantos días por Torrete y Madrid, y acumular grasas para el resto del invierno, que se preveé duro. :)

A todos los que estais tras las pantallas leyendo... FELIZ NAVIDAD, FELICES FIESTAS Y FELIZ SALIDA Y ENTRADA DE AÑO!!!

Bla bla bla... Nos reencontramos el 3 de Enero. Mismo sitio y misma hora!!! ;-)

























miércoles, diciembre 20, 2006

Viendo el No-Fuji: Hakone. Por Japón (3)

Si nos empollamos las guías de viaje, Hakone, es sin lugar a dudas el sitio más recomendable para ver el Monte Fuji en todo su explendor, sin estar demasiado cerca como para que las dimensiones se emborronen y sin estar demasiado lejos como para que deje de imponer. Además de que el enclave rodeado de montañas, bosques y con el lago Ashi (Ashinoko) es más que encantador para que sea un punto clave del turismo japonés.

Así rezaba la lonely planet y así me lo hicieron saber en todas las oficinas de turismo que pregunté. Pues bien. No vi el monte Fuji, que decidió pasar ese día y todos los demás que estuve en Japón, oculto bajo un manto de nubes. No os creais que todo el cielo estaba lleno de nubes. No. Ni mucho menos. Solo la parte del Fuji. Envuelta en una neblina terrible. Soy un hijo de la fortuna. Lo sé. Más lo fue mi acompañante, Carmen, que ya era la cuarta vez que iba a probar suerte desde Hakone (porque ella en dos años en Japón, ya lo ha visto alguna vez desde otras localizaciones o eso me hizo creer a mi. Ja!) y que tendrá que esperar a una quinta.

Obviando la parte del Monte Fuji (ejem) Hakone bien merece la pena una visita. Está situado a unos 100 km al oeste de Tokyo y es muy conocido por sus baños (onsen) y por ser una zona de tranquilidad donde ir a relajarse.


Hakone forma parte del parque nacional Fuji-Hakone-Izu que tiene la diminuta area de 1.280 km2, una minucia que se recorre a golpe de bocata de chorizo, me consta que os haceis cargo.

Llegamos al lago Ashinoko, más especificamente a Hakone-en porque nos daba pie a hacer más cosas, como subir a la cima del Komaga-take o bordear el margen del lago en dirección a Moto-Hakone siguiendo una senda con templos a la orilla del río que fue lo primero que hicimos con la esperanza de que el tiempo aclarara para ver el dichosito monte.


Llegamos a un magnífico e impresionante Torii, una enorme puerta de madera de color rojo que generalmente da acceso a un templo y que en este caso se asentaba en el lago en lugar de en tierra firme.

Si os fijais en la siguiente foto no parece demasiado grande...

Pero pongamosme ahora como referente de escala, que ya sabeis todos que soy un muchacho fornido y vereis como las dimensiones cambian considerablemente. Es enorme!

Siguiendo el camino indicado por el Torii se llega a un templo, cuyo nombre no tuve a bien apuntar y que por lo tanto no recuerdo, pero que metido en las frondosidades del bosque la verdad es que era bastante mágico. A la entrada de todos estos templos siempre hay una "fuente" donde poder "purificarse" lavandose las manos con un cazo y generalmente suele haber alguna figurita (normalmente un buddha) al que se le echa con el mismo cazo un poco de agua por encima.

Además tuvimos la suerte de que justo en este templo se estaba celebrando una boda japonesa, con sus preciosos y sobrios vestidos.

Volvimos a Hakone-en y en vista de que las nubes seguían afincadas alrededor del Fuji decidimos probar suerte subiendo a la cima del Komaga-Take en funicular a ver si disfrutando de las vistas del lago desde lo alto, además nos venía a visitar un ángel y como por arte de magia se abrían los cielos y veíamos a Fuji-san. Pero ni por esas oiga. Lo que si vimos fueron las espectaculares vistas de la zona que nos dejaron sin habla.








Esperamos a las últimas rayos de sol que atravesaban el denso manto de nubes para volver a bajar a Hakone-en y desde allí coger un ferry hasta Mato-Hakone, acompañados por los increibles colores que deja la tarde cuando ya está acostado el sol y se da la bienvenida a la noche.



En resumen, un sitio que merece muchísimo la pena, con o sin Fuji. Según me contaba Carmen es verano si que es practicamente imposible verlo ya que la bruma es tan fuerte que no permite ver a más de varios km de distancia. Pero oigan ustedes, si alguno va alguna vez y lo vé hagamelo saber que me moriré de envidia. :)

Mientras tanto siempre podreis ver las postales que otros más afortunados pudieron hacer. No se puede ganar siempre. ;-)

martes, diciembre 19, 2006

Velázquez y amigos: Karlsruhe Connection

Quién me iba a decir a mi cuando salí de Torrejón, hecho un panete, para irme de Erasmus a Alemania, que iba a hacer tan buenos amigos comos los que hice.

Acabo de tener la suerte de que por motivos de trabajo, el amigo Edu, compañero de residencia del platano de Waldstadt en Karlsruhe, tuviera qu pasar unos días por la ciudad inglesa. Por supuesto el que faltaba para completar el círculo era Graham, nuestro londinense favorito afincado en Edimburgo, que no dudó en bajar desde la tierra de las highlands para tan genial evento. Graham es además, el autor de entre otras "la guía Graham de Pubs de Londres" con la que descubrí Londres durante una breve vista un par de años antes de que viniera aquí a asentar mis posaderas de manera más permanente. (No digamos fija)... ^__^


Mientras os dejo adivinar quien es el ibérico y quien el isleño, os comentaré que tal y como cabía esperar, las risas fueron continuas y ya nos echamos unas buenas pintas a la salud del resto de clásicos de la fauna karlsruhera (entre los cuales están alguno de los que está leyendo esto ahora... me temo) :P

Aprovechamos en un acto cultural que nos pillaba de paso entre pub y pub a visitar la exposición que acoge estos días la National Gallery: Velázquez. Mi idolatrado Velázquez.

Y es que Velázquez es uno de esos artistas que tengo por absolutos genios. Vale que mis conocimientos artísticos no son motivo de jolgorio, pero desde que ví aquella mítica exposición en el Prado (no recuerdo ni la fecha, pero no tenía yo que tener más de 12 o trece años) donde se trajeron obras de todo el mundo para la ocasión, Velázquez me ha impresionado siempre. Me acuerdo perfectamente del madrugón y hacer cola a la entrada del museo madrileño, sin que hubiera salido aún el Sol, para poder disfrutar de sus lienzos. No creo que mis padres supieran lo mucho que esa exposición me gustó, ni todo lo que se me quedó grabada en la parte del cerebro donde se quedan los buenos recuerdos.

Supongo que eso hace que esta exposición en la National Gallery a pesar del esfuerzo que seguro han hecho para que sea de una grandísima calidad, no sea ni por asomo, tan impresionante como aquella. Además me aventuro a decir que la exposición permanente que tienen en el Prado es bastante superior a esta, pudiendo admirarse en Madrid obras como Las Meninas, La rendición de Breda, las Hilanderas y los borrachos. No es que sea una mala exposición valgamé. De hecho se la recomiendo a todo el mundo que no tenga la posibilidad de ir al Prado, pero si pasar por la capi española, meteros un bocata de calamares y disfrutar del genio en estado puro.

Mientras tanto, algunos "highlights" de lo que más me gustó (o que ya sabía que más me iba a gustar... jejejejeje).

De la colección del Prado, la Fragua de Vulcano :

Y Marte (posiblemente el cuadro que más me impresionó de enano y que me sigue pareciendo igual de espectacular):
Y a continuación dos motivos para pagar la entrada:

La vieja friendo huevos de la National Gallery de Edimburgo (aunque sólo sea por ver la clara del huevo a medio cuajar):

Y la venus del espejo: de la propia National Gallery:

Hecha esta breve reseña cultural informaros que tras el lapso artístico, empezamos "la guía Graham de pubs de Londres vol.2" y acabamos en Brick Lane dando buena cuenta de la comida india en compañía de mis dos caseros Marta y Jesús. :)

Un rápido día, fugaz y breve, pero intenso y para recordarnoslo muchas veces. Saludaremos desde aquí al calvo y a sus amigos, por los buenos momentos. Fantastic.